martes, 18 de noviembre de 2008

Desde la Pampa a Barcelona 31-10-2008


En el laberinto de la vida algunas veces se cruzan caminos que unen familias y personas.
Hoy siento eso, siento unión, dos mundos, dos familias , dos continentes, dos culturas, dos amores unidos por la pasión de disfrutar la vida, el momento y creer en el compromiso donde dos personas se unen para darlo todo.
Hoy se nota la magia, el amor y la base donde seres criados en diferentes lugares a miles de kilometros comparten un pasado y valores en común.
Es alucinante escucharlo a Xavi (CAVI) unido a nuestra gran familia (y entenderle el catalán perfectamente!!!). Una familia que cruza fronteras, continentes, prejucios y hace de ella una piña enorme llena de amor, pasión y futuro.
En esta familia veo el futuro de una sociedad diferente, tolerante, universal y sobre todo alegre.
Orgullosa de formar parte de ella y aportar parde de mi familia de la pampa hoy sello un día inolvidable.
Y doy gracias a 'Dios', 'Creador', 'Casualidad o Causalidad', a lo que sea.... que nos haya unido en este gran laberinto de la vida.
A todos los componentes de esta gran familia los quiere mucho LA FILOSOFA DE LA PAMPA.

4 comentarios:

minita dijo...

El AMOR puede con todo!!!
Amor por vosotros dos,AMOR por la familia barcelonesa, AMOR por la familia pampera (no sé si diría así?), AMOR por disfrutar de estos encuentros entre los dos continentes.Qué feliz me hace, mejor dicho que nos hace.

UN besazo

Geni dijo...

Silvi: Me emociona leer tus palabras y ver cómo ha salido de ti lo q siempre ha estado y ahora se hace notar. Esa sensibilidad y humanidad q demuestras día a día en tus palabras y actitudes. Por eso Dios te ha recompensado con Carlos, un hombre tan maravilloso, a tu medida. Estoy muy orgullosa de vos. Q la vida te siga mostrando el camino. Geni

Había algo... dijo...

Grande Silvi

minita dijo...

Doy gracias a Dios que seais tan felices y que esta FELICIDAD sea para toda la vida.
Le doy las gracias a la familia de la Pampa por lo bien que se están por tanto con mi hijo Carlos.

Le pido a Dios que la familia argentina y la barcelonesa se puedan unir algún día rompiendo las distancias que nos separan.

Os llevo en el corazón y en mi pensamiento cada día.

Os quiero mucho, la mama.